domingo, 25 de diciembre de 2011

Sólo cuando tu estás.




Me hierve la sangre, te recuerdo, te quiero aquí. Eres mi adrenalina, mi salidas, mi pereza, mis emociones, mis estrellas fugaces, eres toda la felicidad que el mundo me propaga. Te veo, nudo en el estomago, ganas de abrazarte, gritarte en pensamientos como si alguien pudiese oírme. La sangre entonces para de hervir, se evapora. Me marchitas en cada beso. Te quiero sin escusas. 
Te acercas la piel se deshace y vuela en trocitos convertidos en pájaros en busca de la luna. Ya no siento nada, sólo soy el aire que respiras navegando por todo tu cuerpo y los pájaros que te observan desde arriba. Todo el odio desaparece. Miedos no existen cuando me abrazas, cuando me gritas con tus ojos. Ojos que me llevan a una bahía desierta, sólo tu y yo. 
Ven, sólo quiero ir tu voz como si fuese un bonito piano. Sólo quiero sentir tu presencia para dar alegrías a mis dolores. El mundo es grande, no más que un pañuelo. Grande cuando puedo atravesar tu mirada clavando mis sentimientos como si de espadas se tratase. VEN, QUIERO SENTIR COMO LOS DESEOS SE FUNDEN HACIÉNDOSE REALIDAD ENTRE BESOS Y CARICIAS.

sábado, 17 de diciembre de 2011

Wish you were here.

En la oscuridad sobre un banco bajo la vieja farola esperanza.


Aveces me da miedo llegar arriba, tocar el cielo y sentirme bien. Aveces me da miedo sonreír y ser feliz, porque se que alguna vez caeré y si estoy muy arriba la hostia será universal. Aveces tengo tanto miedo del destino que intento no ser feliz, no llegar a esas nubes que vemos desde el suelo. Aveces siento miedo en esa calle oscura porque no veo lo que hay un paso hacia delante. 
Apuesto que el destino es oscuro, es tan oscuro que no sabemos las cosas que sucederán. Aveces trae presentimientos que son esos reflejos de los faros de algún coche. Y como no vemos las piedras del camino y caemos, aveces tantas veces que los moratones en las piernas se hicieron sin darte cuenta. Y el corazón ve tanta oscuridad que aveces se siente en soledad. No te pares en aquel banco que reposa bajo la farola, sigue por el camino oscuro, siempre habrá alguien que te acompañe y aunque aveces se valla te quedara algo por aprendido o alguna linterna que te ayude a caminar. Hoy te necesito aquí, hoy estas conmigo. Tengo miedo de caer otra vez y sentarme en aquel banco.

sábado, 10 de diciembre de 2011

Quien no arriesga no gana.



Los minutos a tu lado se hacen grandes, se hacen inolvidables. Voy a poner todas mis ganas en esto, voy a dejarlo todo aquí, en esta balanza que viene y va. ¿Y si se va? Moriría tal vez o volvería a levantarme, recuperando las ganas de vivir quizás. Pero hoy eres tu, tu representas todo ahora mismo. Así que hoy pongo todo lo que queda de mi en tus manos, porque tu formas parte de mi y ya no queda nada de mi que no seas tu. Voy a luchar, voy a intentar llevar esto por el camino mejor, tu me llevaste por el de la ilusión, el de la esperanza. 
Voy a dejarlo en manos del destino. Hoy eres tu, hoy tu eres mi única esperanza.

SÓLO 
TU
PUEDES 
HACERME
FELIZ, 
TU MI
VIDA.

martes, 6 de diciembre de 2011

Queda prohibido no sonreirle a los problemas.


La felicidad se mide en gotitas de veneno. Algunas llenas de ira, amor, sacrificio o victoria, pero es felicidad. Sonríe, que nadie te quite la sonrisa, aunque llores, sonríe. Y en cada foto, sonríe, porque recordaras los momentos felices que pasaste alguna vez, que se quedaron ahí y nadie te los arrebatará jamás. 
Felicidad algo que todo el mundo busca como algo lejano, pero lo tiene en las palmas de sus manos.

domingo, 4 de diciembre de 2011

Con mirar sus ojos la felicidad es infinita.

Si fuera por quererte, te querría hasta el fin del mundo. Si fuera por besarte, te besaría toda mi vida. Si fuera por huir, huiría contigo. Si fuera por sonrisas, cambiaría miles de ellas por la tuya. Si fuera por volar, volaría de tu mano, tan alto como quieras llegar. Si fuera por amar, hoy a ti te amo. 


¿De verdad nunca os a pasado? Conocéis a una persona que os llama la atención, pero no le dais importancia. Y van pasando los días sin darte cuenta de que gracias a esa persona has aprendido a querer desde dentro. Y van llegando sonrisas en formas de te quiero y miles de besos por falta de sueños. Y no hay autor, ni moraleja de este libro, de este cuento. Sólo dos protagonistas que no son príncipes, pero se aman y la realidad da igual. El  le hace volar más alto de lo que ella jamás pudo soñar. Ella le hace ser feliz, gracias a ella, el se conoció a si mismo. Cuando la felicidad es infinita, ya nada importa, el pasado sólo es aire.